La coagulación intravascular diseminada (CID) es una realidad clínica habitual que se presenta como fenómeno secundario a numerosas enfermedades, entre las cuales se recalcan infecciones graves, neoplasias y catástrofes obstétricas. Se caracteriza por una activación difusa y simultánea de los sistemas endógenos de coagulación y fibrinólisis. El depósito de pequeños trombos en la circulación conduce a disfunción orgánica múltiple, y en ciertos casos a la muerte. (E. 2001, 15: 623-644.) Las manifestaciones clínicas pueden contener fenómenos trombóticos y hemorrágicos. Se ha planteado un puntaje de fácil aplicación para simplificar el diagnóstico de la entidad. El tratamiento incluye el control específico de la causa subyacente que favorece la aparición de la CID, el soporte con hemoderivados en pacientes con manifestaciones de sangrado y la anticoagulación terapéutica en pacientes con trombosis mayores. El desarrollo de CID es un factor pronóstico desfavorable, que aumenta significativamente la tasa de mortalidad. (J 2010, 23: 167-176)
Lea Tambíen
Bioderecho
Bioderecho RESUMEN: Tiene un vínculo con la bioética y entre otras disciplinas, pues el bioderecho suele …